Se busca hombre alto, guapo (con buena dentadura),
inteligente, educado, saludable y viril para embarazar a las mujeres de héroes de
guerra, se pagara 10 libras por actuación, discreción absoluta. El estado y la
comunidad científica lo apoyan.
SI REÚNEN ESTAS CARACTERÍSTICAS.
ENHORABUENA a tu compañera sentimental, pero llegas
100 años tarde.
Hoy en día existen soluciones sofisticadas y
científicas al triste problema de no tener hijos, desde la Fecundación en Vitro,
pastillas para la disfunción eréctil, los servicios de los donantes de esperma,
la adopción… Pero muchas de ellas son logros muy recientes que han tenido que
pelear para que sean algo normal y aceptado.
Entre las personas que hicieron posible todo ello
destaca Helena Rosa Wright (septiembre
17, 1887 hasta marzo 21, 1982) fue una científica británica pionera en el
control de natalidad y planificación familiar, su obra y sus estudios son de
gran interés que invito a conocer pero que no trataremos.
Entre 1914 y 1918, un millón de soldados británicos murieron en
Francia y en Bélgica, otro millar más fueron heridos, trastornados por los gases
y la tensión. La guerra dejo a muchas mujeres viudas pero con una gran
escasez de hombres o potenciales esposos.
En 1921 Gran
Bretaña tenía un superávit de 1,7 millones de mujeres, que se les conocía como
"la multitud solterona”.
Los jóvenes hombres que afortunadamente regresaron a sus
casas con sus esposas, muchos no
pudieron tener relaciones sexuales, debido a lesiones directas o trastornos de
estrés post-traumático.
Helena Wright tenía cientos de mujeres en sus fichas, que confiaban en ella y que le pedían su ayuda.
Estas mujeres adoraban a sus maridos, pero desgraciadamente, ellos no podían
concebir hijos. Lo que necesitaban era un donante anónimo de esperma, lo
malo es que todavía no existía en aquella época.
Helena Wright no tenía miedo a la controversia
judicial. Superó los prejuicios de la clase médica y objeciones de su
familia para calificar como médico en 1914.
Helena empezó la búsqueda de un hombre muy especial, que pudiera embarazar a toda esa lista de
mujeres que tenía en sus fichas. Necesitaba un hombre sin compromisos
sentimentales, alto, guapo (con dientes
decentes), inteligente, bien educada y saludable - y confiable viril.
El ganador fue el Sr. Derek de 20 años, nacido en 1889 un inglés
nacido en la colonia de Ceilán, hoy conocida como República Democrática Socialista de Sri Lanka, donde su padre tenía una empresa con plantaciones de caucho y té.
Helena Wright, citaba por medio de un telegrama a la
pareja, Derek recibía 10 libras con la condición de guardar el secreto. Los
encuentros se acordaban coincidiendo con días más fértiles para concebir de las mujeres y solían
acertar, pues era muy extraño que repitieran.
Entre 1917 y 1950 Derek, recibió 496
telegramas informándole que había sido padre, pero el fructífero Derek tuvo tres hijos con la mujer que se casó,
dos con la amante de su padre, que tras la
muerte de su padre, pensó que lo que era bueno para papa también lo será conmigo,
4 hijos en algún viaje, pero la mayor parte, fueron con las pacientes de Helena
Wright en las clínicas de Knightsbridge y Notting Hill.
Derek murió en 1974, curiosamente un año después de su
muerte, apareció un anuncio apareció en
PrivateEye ofrecían 50 libras para tener una la relación temporal para
tener un embarazo, quedando atrás toda una historia de tabús, perjuicios y procesos
judiciales.
EPILOGO
Esta historia me la conto una a miga becaria, tras ver el
DVD El amante de Lady Chatterley es
una película francesa de Pascale Ferran, es lo bueno de trabajar en un sitio donde les
encantan las cajas DVD con películas dentro.
La novela fue escrita en 1928 por el escritor británico D. H. Lawrence, causando un gran escándalo, prohibiéndose en
su época, debido a las escenas donde se describen relaciones sexuales de manera
explícita.
El Becario Scholar
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