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Dama de honor o flower girl o chamaya pernikahan
Algo
tan imprescindible como los novios en una boda es o son la dama de honor. No se conoce con seguridad el origen, pero es tan
antiguo como las bodas y tampoco se puede asignar a una religión o rito en concreto,
pero en todas siguen el mismo parámetro.
Suele ser una niña
habitualmente no mayor de 12 años, que
sea familiar directo de la novia, abriendo el séquito y arrojando pétalos de
rosas, de camino al altar, en la religión católica y en otras culturas se cree
que atrae la buena suerte a la pareja,
con cierta simbología de fertilidad y de
amplia descendencia.
En la India si la novia no
tiene una niña familiar consanguíneo, que pueda ser dama de honor, se sustituía
por un chico, que sería el chamaya pernikahan, que traducido seria maquillaje para
matrimonio, el cual se le viste con vestimentas femeninas, para lograr la
fertilidad y la felicidad de la pareja, junto a la bendición de la Diosa Bhagavathy Kottankulangara , famoso por el festival que se
celebra a finales de marzo, donde miles de hombres, independientemente
de su fe religiosa, se visten de mujeres para ofrecer oraciones a la diosa.
En la India, si la novia no tuviese
hermanos, primos hermanos, sobrinos, la tradición recomienda no casarse, puesto que la mala suerte, les
acompañaría a lo largo de su matrimonio,
no podrían tener hijos, serian infieles, se divorciarían al poco tiempo e
incluso la muerte temprana de unos de los conyugues y todo ello por no tener
dama o damo de honor.
No siempre se regaló dinero, ni se celebra una
sola vez
Actualmente es costumbre regalar
dinero, para que los novios lo utilicen para lo que deseen o precisen, pero era
costumbre regalar utensilios para el hogar, como muestra de júbilo y
complicidad con la nueva unión creando un nuevo hogar.
Pese a que los hombres
olviden el aniversario de boda, la costumbre era realizar un regalo de un
material en concreto, que actualmente no son tan valiosos o valorados, como el
papel 1 año, algodón 2 años, madera 5
años, seda 12 años…
En la actualidad se celebran
25 años (plata), 50 años (oro) y con
suerte 75 años (diamante) de matrimonio, siendo una celebración muy familiar e
íntima.
Cuando celebraremos a boda
Los lunes, en la época
prerromana, era el día de la luna o de la diosa madre, símbolo de la fertilidad,
son famosas las venus primitivas de grandes pechos, siendo el mejor día para casarse,
“En martes, ni te cases ni te embarques”
El martes, en la antigua
Romana, estaba consagrado a Marte, el dios de la guerra y se pensaba que era un día de mal agüero para comenzar
algo importante y una boda lo es. En tradición egipcia o la turca, el martes era
calificado como un día aciago.
El viernes era el día de la
diosa del amor Venus, que haría de que el amor
de la pareja durara eternamente.
El domingo domínicum, de dómine
(señor), en la época prerromano era el día dedicado al dios sol, los
católicos lo adaptaron a su credo. El dios sol daría salud, abundancia y gozo.
En la Edad Media, las
mujeres intentaban casarse en luna llena, puesto que consideraban un símbolo de
fertilidad y dichas económicas relacionadas con el color plateado de la luna,
pero en esta época nadie se casaba en invierno debido a la creencia que todo
estaba casi muerto, debido al frio y la escasez de productos en los campos.
La fotografía y fotógrafos profesionales
Desde que Joseph-Nicéphore Niépce realizara la primera fotografía
en 1826, solo se tarda 14 años en realizar la primera foto de boda, el enlace
de la boda de la reina Victoria con el príncipe Alberto en 1840,
pero no sería hasta la década de 1860, cuando las parejas empezaron a posar vestidos de boda.
Debido a la necesidad de
buena iluminación y gran tamaño de las cámaras, no sería hasta la década de
1880 que no se pudo contratar a un
fotógrafo inmortalizar la boda, los regalos, la fiesta e invitados, naciendo
los reportajes fotográficos.
La fotografía en color, nacía
en los años 20 del siglo pasado, pero su poca calidad y precio, no resulto
atractiva.
Tras la Segunda Guerra
Mundial, gracias al rollo de
película y la cámara compacta con lámparas de flash, los fotógrafos,
a menudo se presentaban en una boda, para tratar de vender después las fotos, a
menudo de muy baja calidad.
La competencia y la baja
profesionalidad hicieron que en los años 70 nacieran los fotógrafos profesionales
de eventos sociales, realizando todo el reportaje y documentales que
actualmente contratamos.
Enlaces sobre fotógrafos de bodas.
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